Richard David Bach. (Oak Park) 23 de junio de 1936. Escritor estadounidense, que compagina su afición a volar y lo utiliza en sus escritos. Fue piloto de la fuerza aérea de Estados Unidos. Algunos títulos de sus obras: "Ajeno a la Tierra" (1963), "Biplano" (1966), "Nada es azar" (1969), "Juan Salvador Gaviota" (1970), "El don de volar" (1974), "Ningún lugar está lejos" (1976), "Ilusiones" (1977), "El puente hacia el infinito" (1984), "Uno" (1988), "Al otro lado del tiempo" (1993), "Alas para vivir" (1995), "Fuera de mi mente" (2000), "Crónicas de los hurones I, en el mar" (2002), ... "II, En el aire" (2002), ... "III, Con las musas" (2003), ... "IV, En el rancho" (2003), "Vuela conmigo" (2009), ...
- Eres maestro de lo que has vivido, artesano de lo que estás viviendo y aprendiz de lo que vivirás.
- Una forma de elegir un futuro es creer que es inevitable.
- Si tu felicidad depende de lo que otra persona hace, supongo que tienes un problema.
- Lo que para la oruga es el final del mundo, para el maestro, es una mariposa.
- Rompe las cadenas de tu pensamiento y romperás también las cadenas de tu cuerpo.
- Siempre eres libre de cambiar de opinión y elegir un futuro diferente, o un pasado diferente.
- Evita los problemas y nunca serás uno de los que los superó.
- Las verdaderas historias de amor nunca tienen final.
- Las cosas malas no son las peores que te pueden ocurrir. Lo peor que te pude ocurrir es que no te ocrurra nada.
- Gaviota que ve lejos, vuela alto.
- Justifica tus limitaciones y te quedarás con ellas.
- Las cosas más simples son a menudo las más reales.
- La mejor manera de pagar por un momento encantador es disfrutarlo.
De "Juan Salvador Gaviota":
"Amanecía, y el nuevo sol pintaba de oro las ondas de un mar tranquilo. Chapoteaba un pesquero a un kilómetro de la costa cuando, de pronto, rasgó el aire la voz llamando a la Bandada de la Comida y una multitud de mil gaviotas se aglomeró para regatear y luchar por cada pizca de comida. Comenzaba otro día de ajetreos. Pero alejado y solitario, más allá de barcas y playas, está practicando Juan Salvador Gaviota. A treinta metros de altura bajó sus pies palmeados, alzó su pico, y se esforzó por mantener en sus alas esa dolorosa y difícil posición requerida para lograr un vuelo pausado".
Richard Bach.